Una bolsa de 165 personas condenadas a trabajos en beneficio de la comunidad está a disposición de los juzgados de instrucción de Valencia a diario. Su tarea es un tanto peculiar. Consiste en hacer de figurantes, cuando son requeridos, en las ruedas de reconocimiento de sospechosos.
La mayoría fueron sentenciados por conducir ebrios o por exceso de velocidad. Los juzgados de instrucción pusieron en marcha hace tres años una experiencia piloto que ya se ha extendido a más municipios del área metropolitana y a otras provincias de España.
Según fuentes judiciales, hace unos años llegó a ser realmente complicado encontrar personas dispuestas a realizar estas tareas. Se solía utilizar a presos, pero su traslado a los juzgados suponía correr riesgos, además del gasto.
Fuente y leer más: 20minutos
Be the first to comment